Hospital oncológico está abandonado y lo usan indigentes
Se requieren por lo menos 19 millones de dólares, de los
cuales 17 involucran equipamiento, lo que incluye un acelerador lineal.
La ciudad de La Paz cuenta con una infraestructura
destinada a ser un hospital oncológico, que llegó a construirse en un 30% a un costo de 500 mil dólares. Hace 18 años
que está abandonado y hoy no es más que un "elefante blanco”, ubicado en
medio del bosquesillo o la meseta de Achumani.
Curiosamente, mientras las instituciones gestoras del
proyecto o propietarias del terreno, como
la Alcaldía de La Paz, le han
puesto una lápida al mismo. Sólo los vecinos de ese tradicional barrio
de la zona Sur han demostrado su solidaridad con los pacientes de cáncer al
realizar gestiones desde hace por lo menos siete años para que el hospital
oncológico sea concluido.
Suelen exhibir
documentación que data del año 2010, papeles que revelan el interés vecinal
porque La Paz cuente con un hospital oncológico para atender a pacientes que
sufren de ese mal que año tras año se
cobra vidas.
"Nadie está libre de adquirir esta enfermedad”,
reflexiona la presidenta de la junta
vecinal de Achumani, Catalina Ramírez, y pide a las autoridades solidaridad con
los enfermos de cáncer.
Los papeles y los sellos cuentan la historia de las
gestiones, las peticiones, las reuniones con técnicos de la Alcaldía y con
subalcaldes. Hay cartas que datan de 2013 dirigidas al alcalde Luis Revilla.
La alarma vecinal crece porque además del abandono total
a la infraestructura, se suma el pillaje y robo por parte de malvivientes que
en las noches ingresan a la construcción, consumen bebidas alcohólicas en sus
ambientes, destruyen vidrios y destripan el equipamiento médico.
Inclusive en el
segundo piso los invasores sacan las camillas y asientos al exterior
para tomar sol, cual si el lugar se tratara de una amplia terraza.
Para Ramírez urge que las autoridades del municipio den
"de una vez” funcionalidad al lugar. Pese a la tupida vegetación, geranios
y musgo, la calidad de la construcción y del material utilizado demuestra su funcionalidad: las gradas son
sólidas, existen ambientes ya dispuestos para su uso inmediato (baños,
vestidores, oficinas y enfermería), y a otros, como el auditorio, simplemente
le falta cementar el piso y en la parte externa concluir la obra para que la
lluvia no le afecte.
"Hay un búnker forrado. Es una cámara con paredes de
cemento con plomo para evitar la diseminación de la radiación, lo que costó un
platal”, cuenta el presidente de la Fundación Boliviana Contra el Cáncer,
Carlos Salamanca.
Esa fundación fue la
gestora del Hospital Oncológico en los años 70. Una de las fundadoras de
esa institución, Doris Hauson, cuando supo que su esposo tenía cáncer descubrió con él que en la Bolivia (de esa
época) el sistema de salud no podía atender tal enfermedad, lo que al parecer
no cambió en los siguientes 47 años.
Salamanca explicó
que no puede dar continuidad a dicha construcción porque la fundación ya
invirtió medio millón de dólares y no tiene más recursos.
Se requieren por
lo menos 19 millones de dólares, de los cuales 12 involucran equipamiento, lo
que incluye un acelerador lineal y unos dos millones de dólares más para lo que
es el trabajo de albañilería final, explicó Salamanca a este medio.
El presidente de esa fundación grafica el renunciamiento
de esa institución para continuar con el proyecto señalando que terminaron
"levantando las manos”.
Página Siete también consultó al secretario municipal de
Salud de la Alcaldía de La Paz, Roger Tapia, sobre el destino que tendrá la
infraestructura que se encuentra en predios municipales, ya que existen
versiones en sentido de que sería demolida.
"¿Le darán funcionalidad a lo avanzado?”, preguntó
este medio a Tapia: "En este momento quien puede definir esto (el destino
de la construcción) es una respuesta que tiene que dar el mismo alcalde (Luis
Revilla)”, dijo.
De hecho la autoridad municipal aclaró que el municipio,
en cumplimiento a normativas legales, tampoco puede dar continuidad a la
conclusión de este proyecto.
Tapia señala que el tema de oncología es competencia
de la Gobernación de La Paz o del
Servicio Departamental de Salud (SEDES). Por norma debe ser atendido en ese
"tercer nivel”.
Sobre la preocupación vecinal en sentido de que la
infraestructura sería demolida por la Alcaldía, el secretario de Salud
respondió que será necesario hacer una valoración al respecto "para ver en
qué condiciones está. Son más de 10 años. hay que hacer un estudio para validar
su uso”.
Cuando este medio visitó la infraestructura, el lugar
constató que hay al menos dos excavaciones de más de un metro de profundidad, hechas en
ambientes internos de la construcción,
además de otras perforaciones a pilares y muros de la obra, supuestamente con el objetivo de establecer la resistencia,
calidad y perdurabilidad de la construcción.
Esas excavaciones y "tests” sobre la durabilidad de
la obra, según testimonio de los vecinos, fueron hechas por funcionarios de la
Alcaldía. Al respecto, se informó a Tapia que las valoraciones y exámenes a la
calidad de la construcción ya fueron hechas por el municipio. "No conozco,
tendría que consultar”, dice.
Es notoria, al ingreso de la infraestructura, la "piedra fundacional” de una obra que
parece que no será concluida.
Pagina
Siete / J. Carlos Palacios
Hospital oncológico está abandonado y lo usan indigentes
Reviewed by Fabian
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6:26:00 a.m.
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