60% del clorhidrato de cocaína incautado se produce en Bolivia

En lo que va del año ya se superó la cantidad confiscada de esta sustancia en todo 2015. Bolivianos y extranjeros purifican la droga con pasta base que llega de Perú.

La mayor cantidad de clorhidrato de cocaína que la Policía  incautó en los últimos meses se elaboró dentro del territorio boliviano, entre  60% y  70%, según una fuente oficial.

"En su mayor cantidad se fabrica acá, hasta un 70%, un 60%. Producto de eso tenemos buena cantidad secuestrada de clorhidrato  en nuestro país”, informó ayer el director nacional de la FELCN, Santiago Delgadillo.

En 2015 subió en 111% la cantidad incautada de clorhidrato (cocaína pura)  con respecto a 2014, de cuatro  a 8,6 toneladas. El incremento se dio desde hace dos años.  Sólo en el primer semestre de esta gestión se secuestraron nueve toneladas de esta sustancia, más que en todo 2015.

Asimismo, de enero a junio de este año se reportó la destrucción de  36 laboratorios de cristalización (ver infografía). En estos lugares se convierte la pasta base de cocaína en clorhidrato mediante un proceso químico. 

El primer semestre del  año pasado se tuvo  la misma cifra: 36 laboratorios de cristalización destruidos, 73 en todo 2015, de los cuales 59 estaban en Santa Cruz. 

  Los narcos instalan estos centros en zonas de difícil acceso, cubiertos por la espesa vegetación y con una fuente de agua cercana.   

Delgadillo explicó que el resto del clorhidrato  (un 40% de lo incautado en el país) proviene de países vecinos. Prácticamente toda la sustancia se envía a otras naciones. Bolivia se constituye así en un país de origen y tránsito, pero no de destino final de la droga.

 La pasta base, extraída de la hoja de coca y utilizada para elaborar el clorhidrato, llega en su mayoría de Perú. En territorio boliviano se instalan los laboratorios con apoyo de extranjeros. 

Los precios varían de acuerdo con la región. En Perú, según Naciones Unidas, un kilo de pasta base cuesta 843 dólares y uno de clorhidrato, 1.178. Extraoficialmente se conoce que en Santa Cruz un kilo de pasta base cuesta 1.400 dólares y uno de clorhidrato, hasta 3.000. En Asia o África el kilo de esta última sustancia puede costar hasta  70.000 dólares.

  

  De las avionetas a los mochileros

Los narcotraficantes optaron por utilizar a los mochileros como "mulas” para transportar droga de Perú a Bolivia y dejaron de lado las aeronaves, que se habían vuelto el blanco de la Policía de ambos países.

"Perú implementó el derribo de avionetas y producto de esto bajó el tráfico de droga vía aérea en un 90%. Por esto los narcotraficantes migraron a las mochilas. Utilizan a los mochileros, entran por el lago, por el norte de La Paz”, explicó el director nacional de la FELCN, Santiago Delgadillo.

 Aunque no se tiene un dato preciso, los casos de mochileros sorprendidos con sustancias controladas, principalmente en la frontera con Perú, se incrementaron, dijo el jefe policial. 

 Cada mochilero puede cargar hasta 20 kilos de droga camuflada. Se trata de una cifra pequeña en comparación a la que puede llevar una avioneta, a menos que se lo haga de forma masiva. Así se cortó en parte el "puente aéreo” para transportar cocaína por el norte boliviano. 

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