
Que la
victoria de Bolivia no tape algo que rayo lo bochornoso, el Estadio Hernando
Siles tuvo más del 60% de su capacidad copada por hinchas visitantes, ridículo.
Hacer jugar a Bolivia como visitante, por un objetivo primario de la empresa
encargada de vender las entradas, el Banco Mercantil Santa Cruz, es voltear
taquilla sin importar a quién vende.
Eso no puede
volvernos a pasar, la Federación Boliviana dio una instrucción y la tribuna
visitante era en la bandeja alta de la zona de preferencia, pero en
ventanillas, los propios supervisores de venta, daban autorización constante
para vender a hinchas del Perú en curvas, en general. Hinchas identificados con
camisetas y bandera, no sólo hinchas de a pie. Pedir un documento de identidad,
parece pecado y un imposible.
A los bolivianos en el exterior nos destinan a comprar boletos con un monto elevado (las más caras del estadio), una locación de venta específica lejos del estadio, y una tribuna en el gallinero de los estadio. ¿Cómo se logra eso? con orden, con organización, con capacitación de todos (boleteros, dirigentes, hasta policías), con logística, planificación. No puede volvernos a pasar, estamos a años luz, pero vamos para adelante, lo del Siles que se vistió de Estadio Nacional de Lima, fue un retroceso en este aspecto.
Roberto Acosta E. de LATE



