Este año hay 8 mil bachilleres que tienen entre 50 y 84 años

Las personas adultas estudian en los Centros de Educación Alternativa, otrora llamadas CEMA.

Los participantes de los Centros de Educación Especial pueden obtener el título de bachiller en cinco años. La capacitación está dirigida a mayores de 15 años.

El sueño de Ramiro, un hombre de 66 años, está a punto de cumplirse. "Mi mayor propósito es concluir mi bachillerato”, dice tras esperar con ansias   2017, porque será el  año en  el que  saldrá bachiller  del Centro de Educación Alternativa (CEA) 18 de Mayo.

Él recuerda que dejó de estudiar cuando concluyó el tercero de primaria, porque debía trabajar para ayudar a su familia. Después  "tuve mi esposa y  cuatro hijos y  por eso dejé de lado seguir mis estudios”, asegura. Pero hace tres años todos sus hijos se casaron y él retomó su sueño "retorné a clases y seré bachiller”.

Según el viceministro de Educación Alternativa y Especial, Noel Aguirre,  este año egresaron   8.069 bachilleres que tienen  entre 50 y 84 años, y que estudiaron en los 700 centros de educación que hay en el país. "La mayoría, 5.395 participantes, tiene entre 50 y 59 años”, explicó.

En los datos del viceministerio también se destaca que 2.099 tienen entre 60 y 69 años, y 575 oscilan entre 70 y 84 años.

"La mayoría son varones”, reconoció Aguirre, aunque resaltó que en los últimos años hubo una gran cantidad de mujeres que se inscribieron  a esos cursos.

Según la Ley 070 de Educación Avelino Siñani-Elizardo Pérez, la educación alternativa es dirigida a personas mayores de 15 años. Los que acceden a esta formación son, por lo general, personas que dejaron sus estudios y que ahora buscan retomarlos.

A primaria, que dura dos años,  ingresan aquellas personas que hayan cumplido 15 años o más y a secundaria, que dura tres años, ingresa gente que tiene por encima de los 18 años.

Según la autoridad educativa, este año fueron cerca de 20.000 personas mayores de 20 años las que obtuvieron su título de bachiller en humanidades.

Aguirre comentó que pese a que los mayores de 50 años representan menos del 50%, son los que incluyen su experiencia en su formación.

 "Tienen sus particularidades;  por ejemplo, son personas que cuentan con una cantidad de experiencia mayor que el resto (de su curso). La combinación de eso  más la formación que reciben  logran  brindar una orientación al  curso  que pertenecen”, aseguró Aguirre.

Además explicó que muchos de ellos  también asumen el rol de padres con los más jóvenes, pero también reconoció que atraviesan   ciertas dificultades; "por ejemplo, su capacidad de concentración es baja y su motricidad disminuye”, lamenta.

No obstante, la autoridad aseguró que los docentes se ocupan de utilizar metodologías para mejorar la formación.

 Ramiro dice que la artritis que le diagnosticaron hace dos años   no será una limitante para que concluya sus estudios. "Si puedo,  estudiaré en la universidad, quisiera ser psicólogo”, dice.

Pagina Siete / Verónica Zapana S.