Bolivianos fueron expulsados de balneario en Argentina tras ser acusados de ensuciar el agua

Integrantes del grupo familiar que fueron desalojados del club privado. Foto extraída del portal de Río Negro

Los miembros de la familia afectada denunciaron el trato y la manera en la que fueron desalojados de un club recreativo en la ciudad de Allen, en la provincia de Río Negro el 1 de enero.

Los integrantes de una familia boliviana denunciaron que fueron expulsados de un balneario privado Arco Iris en Allen, provincia de Río Negro de Argentina, por supuestamente ensuciar la piscina. El hecho ocurrió el 1 de enero pero recién se conoció este miércoles.

“Nos dijeron que sí podíamos entrar a la pileta (piscina), pagamos la entrada y cuando estábamos en el agua vino un hombre a sacarnos de muy mala manera. Nos dijo que no teníamos la ropa adecuada y que estábamos ensuciando el agua, que la gente se estaba quejando”, contó Wendy S., una comerciante de origen boliviano.

Una nota sobre el hecho fue publicada en el portal rioplatense Río Negro y compartida por la cuenta de Twitter y página web del consulado boliviano en Rosario, Argentina.

Representantes del club privado negaron que se trate de un caso de discriminación y explicaron que el personal tuvo que desalojar a la familia porque no tenían trajes de baño para ingresar a la piscina, algo que va en contra de su reglamento.

“En el club hay reglas que cumplir: nosotros pedimos que las chicas se aten el pelo y se bañen con traje de baño…El hecho no tiene que ver con la discriminación sino con cumplir con las reglas de convivencia”, señaló uno de los trabajadores del local al medio de comunicación argentino.

La afectada relató que cuando se retiraron del club el mismo hombre que los había expulsado de la pileta golpeó a su cuñado, le arrojó al suelo el dinero de las entradas y le dijo “boliviano de m...”.

Según relató el empleado, los bolivianos reaccionaron a los llamados de atención, ocasionando una discusión que alteró al resto de los bañistas, quienes solicitaron que los saquen de los ambientes del club.

El incidente aconteció en el club privado Arco Iris en Allen, a 971 kilómetros de distancia de la capital argentina.

La Razon / Rodolfo Aliaga