Aviones de Aerosur son chatarra y parte del cementerio de aeronaves
Siete aviones de la desaparecida Compañía Boliviana de
Transporte Aéreo Privado (Aerosur) son chatarra y parte del cementerio de
aeronaves que hay en el aeropuerto Jorge Wilstermann.
Las aeronaves están deterioradas en el sector este del
enmallado del aeropuerto. Después de años, además fueron desmanteladas y se
incendiaron dos veces.
Por fuera se puede apreciar que les faltan varias partes,
efectivamente, se conoce que se aprovecharon varias piezas para otras naves que
hoy están en funcionamiento.
Tienen todas las puertas abiertas o, en todo caso, rotas
y arrancadas. Los incendios provocaron que los Bomberos del aeropuerto se
movilicen.
Uno de los miembros de Bomberos, Boris Terceros, explicó
que los aviones parqueados no representan un riesgo como tal para los despegues
y aterrizajes, porque están a más de 50 metros de la pista, como indica la
norma. Sin embargo, se encontraron botellas de alcohol y de clefa en el
interior. Se presume que algunos inhaladores logran burlar la seguridad y se
refugian en estas naves que en algún momento sirvieron de transporte. Sin
embargo, ahora sólo son chatarra que fue abandonada por quienes dirigían la
empresa, cuyo paradero es desconocido.
Asimismo, la empresa Transporte Aéreo Militar (TAM) cuenta
con algunos aviones fuera de servicio.
Sin embargo, éstos se encuentran en su hangar cerrado. Se
estima que por lo menos hay 21 en desuso en todo el aeropuerto.
PROCESOS
TIENEN MÁS DE SIETE AÑOS
Aerosur tuvo una época de auge hace 10 años cuando presentaba
constantemente todo tipo de aviones de última tecnología para volar por
Latinoamérica, Norte América y Europa. Sin embargo, hace siete años, el
Gobierno nacional denunció a los directivos por irregularidades.
El gerente de Aerosur, Humberto Roca, fue acusado por el
presidente Evo Morales de conspirar contra el Gobierno. La empresa logró
sostenerse por lo menos dos años más hasta 2012. Sin embargo, luego de
numerosas denuncias y problemas, quebró dejando a miles de trabajadores sin su
fuente laboral.
Aerosur corría la misma suerte que el Lloyd Aéreo
Boliviano, años antes. Sin embargo, la empresa terminó de cerrar con la
denuncia por “quiebre fraudulento”.
LOS TIEMPOS / Lorena Amurrio Montes
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12:09:00 p.m.
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